Tuesday, November 25, 2008

SPAN 364 domingo, 23 de noviembre de 2008 – blog, resumen

En suma, este curso me gustó mucho. Hemos estudiado textos y obras bien diversos. Desde los fracasos de Cabeza de Vaca, hasta el punto de vista femenino de Sor. Juana Inés de la Cruz y la visión picaresca de Jose Joaquin Fernandez de Lizardi, ha sido una plétora de literatura para criticar. Hemos discutido los pensamientos y críticas de todos los autores sobre la sociedad. Mientras Cabeza de Vaca aprovecha de la gente indígena, Bartolomé de las Casas los defienda, predicando de no matarlos y aprovecharlos para que sean evangelizados. Ambos escriben desde el punto de vista español y sólo tienen el conocimiento de sus propias culturas. En cambio, Garcilaso de la Vega escribe desde un punto de vista mezclado entre indígena y español. En todos los textos el indio es él que va engañado y conquistado. Sin embargo, quién es él que realmente vence el otro, ¿el español o el indio? Se destaca el hecho de que aunque si los indígenas estén conquistados, retienen ambas culturas de la gente indígena y la de la gente española. Por otro lado, el amo español sólo tiene conocimiento de su propia cultura. Y para cambiar de período, hemos estudiado la escritura de Sor. Juana Inés de la Cruz y después, la de Jose Joaquin Fernandez de Lizardi. Como los autores ya mencionados, estos dos incorporan semejantemente una especie de búsqueda de identidad. Sor. Juana Inés de la Cruz se distingue por su identidad como el primer escritor femenino en el mundo de la historia literaria española. Sus críticas de la ignorancia masculina de ese período eran muy profundos y revolucionarios durante ese tiempo. Corría el riesgo de ser castigada por esa especie de blasfemia contenida en su poesía. Por eso era admirable como escritor y todavía es uno de los más influénciales de la identidad literaria española. Después, leímos una obra de José Joaquín Fernández de Lizardi que era divertidísima en el sentido que seguimos las aventuras, o sea desaventuras de Pedro. Lizardi desarrolla su propia perspectiva sobre el modo picaresco y vemos un comentario social más allá de sus palabras. Es para mí, el más divertido de todos los textos porque hay en sí, un narrativo que es un paragón de las obras del Siglo de Oro, pero producido desde un punto de vista latinoamericano. Se encuentra con todas las obras picarescas, un pícaro que nos dice lo que piensa desde el mecanismo del diálogo, sea cuando está dicho, sea no está dicho. Todo, mientras desempeñado el papel de la deconstrucción de los valores distintos entre proletaria y licencia.

Tuesday, November 18, 2008

SPAN 364 domingo, 16 de noviembre de 2008 – blog, Jose Joaquin Fernandez de Lizardi segunda mitad

Me gustó tanto la segunda mitad de El periquillo Sarniento. Me interesó en particular lo que Joaquin Fernandez de Lizardi quería llamarnos la atención respeto a las moralejas escondidas dentro del texto. Pedro llega a ser médico como el cumbre final y punto definitivo de su vida y carrera mentirosa. Aquí me fijé en las semejanzas de este momento cuando se hace médico y en Naufragios en el momento cuando Cabeza de Vaca se hace médico de modo que cura a los indígenas. Me pareció que ambos personajes de Pedro y Cabeza de Vaca fueran dirigidos hasta un cierto punto por el destino. Vi el caso de Cabeza de Vaca de modo que era español así que solía aprovechar de la gente indígena, pues ya no era una nacionalidad sino una de las características de su personalidad como opresor. Y de modo similar, el caso de Pedro como era destinado a llegar hasta ser médico, un puesto de respeto y logro de que él codiciaba como si fuera casi obsesionado con el poder. Pues aquí entra el factor del destino en la ecuación de su juicio. Desde que su personalidad había sido formada por su educación durante su niñez y la relación con sus padres, tienen mucho que ver con la manera en que se comporta y como que su primer instinto es mentir. Pues, sus características mentirosas son tan fuertes y moldeadas que para él, no hay otro remedio de ganar el pan sin engañar a los demás. Ambos tienen la opción de ser honesto, pero siguen mintiendo y aprovechando de la gente como si fuera un juego, o sea una prueba personal para encontrar el sustento, mientras divirtiéndose de una manera u otra. Además ambos personajes son malos como médicos en esos momentos angustiosos que le pueden hacer héroes adorados por los pacientes y el resto de la tribu. Al mismo tiempo si fracasaran, conduciría a su fallecimiento o castigo. Sin embargo, ambos son exitosos en esos momentos críticos, y eso debido a la fuerza de sus caracteres. Una diferencia entre los dos se encuentra en la manera como descubren sus propios papeles como médicos. Para Cabeza de Vaca, el momento decisivo de los eventos sería dirigido por su hambre y su habilidad de ilusionar y inventar. Así se asigna el papel del médico para sobrevivir. En el caso de Pedro, si no tuviera ese deseo ardiente de engañar la sociedad, se las apañaría con un puesto simple que no sería especializado. Entonces, roba el papel por ese conflicto interior del cual se sufre y se divierte.

Monday, November 10, 2008

SPAN 364 domingo, 09 de noviembre de 2008 – blog, el periquillo sarniento

En la primera mitad de El periquillo sarniento fue interesante analizar el personaje de Pedro porque es un tipo antihéroe que tiene muchas aventuras trabajando día tras día para ganar el pan diaria. Me gustó leer sobre su niñez y como crecía en la clase media. Después vivía una especie de vida mentirosa. Sí se encontraba en cualquiera tipo de problema, se fugaría hasta la próxima aventura. Dentro del narrativo y los discursos filosóficos, es obvio que Jose Juaquin Fernandez de Lizardi hace crítica de la sociedad, la religión y el papel de cada persona. Nos relata una descripción de la vida mexicana de esa época. Visto que Pedro tenía trabajos que no eran de la clase alta, podemos ver casi una versión verdadera de la historia en que la tendencia de la alfabetización empezaba a cambiar desde reservada para la aristocracia, a aparecer en obras del proletariado. Respeto a la alfabetización, esta polémica es relevante hoy en día porque según las estadísticas todavía hay un gran cifre de lectores inactivos en América Latina, o sea gente que sabe leer y escribir pero no lo practica. Pedro parece un paragón del personaje de don Quijote, de Miguel de Cervantes Saavedra. Ambos personajes ambulantes se las apañan por una serie de desventuras y salen corriendo hasta el próximo lugar para sostenerse. El fracaso constante predomina los dos textos desde la comienza hasta el fin. Lo que pasa es que mientras esas desventuras, se comunica un diálogo entre los personajes que dirige el narrativo. Si analizamos este diálogo, vemos más allá al fondo una crítica social en ambos textos de Miguel de Cervantes Saavedra y Jose Juaquin Fernandez de Lizardi. Más aún aparece el papel del barbero cirujano alrededor de don Quijote y del mismo modo, Pedro trabaja como barbero. Era un puesto apreciado en esa época porque los barberos sabían y hacían mucho más que los barberos hoy en día. Entonces este cambio de trabajo puede representar un aumento de status, o sea el respeto y la posición social de Pedro. Además hay semejanzas entre El periquillo sarniento y La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades. Por ejemplo, ambos Pedro y Lázaro tienen la misma motivación hacia el pan, que aparece a lo largo del texto de Lazarillo de Tormes como símbolo de la vida, o sea el sustento.

Tuesday, November 4, 2008

SPAN 364 domingo, 02 de noviembre de 2008 – blog, segunda parte de Sor Juana Inés de la Cruz

Me gustó tanto la segunda parte de los textos de Sor Juana Inés de la cruz. Por su delicado y poderoso uso de la poesía como medio de defender su sexo, ya es evidente que domina el campo del idioma escrita. Además de ser utilizada en la lucha por este grandísimo empeño social, su habilidad artística y fluidez de expresión se ven en esta escritura maravillosa. Ya podemos ver que aún es otra manera de expresar la importancia de obtener el derecho necesario y fundamental de aprender y estudiar lo que quieren las mujeres. Sor Juana Inés de la cruz sabía bien las repercusiones de tales declaraciones fuertes durante esa época y aún no reprimió decir lo que necesitaba expresar. Por eso era una mujer valientísima oponer las normas de esa edad. Su poesía es similar a su escritura de la carta de respuesta de modo que es obviamente capaz de expresarse muy fácilmente mientras llegar a un punto muy profundo. En los otros libros que hemos leído Garcilaso de la Vega, Cabeza de Vaca, y Bartolomé de las Casas se quejan de no haber demasiado palabras en el idioma de español para expresar lo que estaba pasando. Así que lo que ha sido un problema para ellos es una oportunidad para ella. Sor Juana Inés de la cruz aprovecha el surtido de palabras que está disponible y disfruta del uso de un idioma que según ella, está lleno de posibilidades e ironías. Además, ni de la Vega, ni Cabeza de Vaca, ni de las Casas tienen que representar la mitad oprimida del resto de la sociedad. Por ejemplo, en Hombres necios que acusáis, nos está mostrando la ignorancia de los hombres en la manera que ellos están inventando problemas y escenarios que realmente no son problemas y de primero, ni siquiera existen. Hay un juego de palabras a lo largo del texto en que de una manera u otra está robando los hombres de sus propias palabras. A través de estas palabras, los hombres inventan un par de personajes imposibles para las mujeres. Quieren que las mujeres se comporten entre una diosa y una prostituta. Esta paradoja, o sea esta demanda imposible hecha por los hombres requiere que las mujeres sean fáciles y al mismo tiempo que no sean putas.